MANIFIESTO DE LOS INVESTIGADORES EN PARIS

Y despues de esto... que? Esta pregunta resuena en la cabeza de muchos investigadores espanoles residentes en el extranjero y, en nuestro caso concreto, en Paris. En los ultimos annos la investigacion nacional ha experimentado un renacer a nivel internacional que autorizaba a pensar, permitasenos el simil deportivo, en una ciencia espannola de primera division. Sin embargo, el ultimo baile de cifras en el presupuesto asignado a la investigacion nacional escenifica, de nuevo, el lugar que historicamente otorgamos a los investigadores y a sus proyectos. Es cierto que precariedad, inestabilidad o austeridad son palabras tristemente de moda en la sociedad espannola de hoy, pero en lo referente a la investigacion en Espanna vienen siendo nuestras incomodas companneras desde los origenes. Incluso en epocas de vacas gordas de nuestra economia, quedaron sin convocar becas y ayudas que han frustrado o truncado la carrera de investigadores ciertamente prometedores. La salida para muchos, en el peor de los casos, es el abandono de la investigacion; en el menos malo, el viaje por un tiempo que suele volverse indeterminado. Salida casi obligada hacia otras geografias en las que la investigacion goza de legitimidad politica y social; donde el investigador encuentra la consideracion y dignidad a la que cualquier profesion aspira.

Para los que no esten familiarizados con una carrera investigadora tipo intentaremos resumirla en pocas lineas. Tras obtener el titulo de licenciado, con buen expediente academico, se entra a formar parte, como joven investigador, de un departamento. Se solicita entonces una beca de investigacion con la que mantenerse economicamente. Es importante entender que las becas no son una simple ayuda o un mero suplemento economico para el investigador, sino que -por norma general- representan el total de sus ingresos. Es su salario y su modo de cotizacion. Pero, en mas ocasiones de las deseables, las becas tardan en concederse, por lo que es muy probable que durante meses el investigador trabaje -investigando o impartiendo clases- gratis. Existen otros trabajos o profesiones donde esta situacion se tolere y se convierta en costumbre? Quien continua adelante entra en una competicion de fondo, llamada doctorado, que consiste en llegar al final con un curriculo sobresaliente. Despues de ese tiempo, el joven investigador -que ya no es un estudiante en periodo de formacion, sino un profesional con la mas alta cualificacion capaz de realizar aportaciones en el campo del conocimiento- roza la treintena, con suerte ha cotizado un par de annos y no cuenta con demasiadas perspectivas de futuro estable.

Con el objetivo de enriquecer la formacion, y alcanzar los niveles exigidos por las agencias de evaluacion, se hace imprescindible realizar estancias en centros de investigacion extranjeros. No todos logran financiacion para las estancias, por lo que otros vuelven a quedarse en el camino. Los elegidos se incorporan en prestigiosos grupos extranjeros de investigacion que los reciben encantados de contar con investigadores-doctores cuya formacion ha sido subvencionada en Espanna -a veces incluso pagados por las administraciones espannolas- mientras ellos recogen los frutos de su etapa mas creativa y productiva. En este punto el investigador ha sobrepasado la treintena, no suele tener bienes propios, las continuas travesias han dificultado la estabilidad en sus relaciones personales y, ademas, los recortes de presupuestos y la endogamia universitaria constituyen dificultades annadidas a su posible retorno. El investigador en el extranjero ve como sus colegas europeos o americanos, de trayectorias comparables, gozan de una estabilidad profesional y familiar que contrasta vivamente con la precariedad de la suya. En definitiva, cuando un curriculo sobresaliente, las estancias en el extranjero y los sacrificios personales no garantizan un futuro, a quien puede extrannar la famosa fuga de cerebros?

Pocos expertos internacionales dudan de la calidad cientifica de las nuevas generaciones de investigadores espannoles. Constituimos una de las generaciones que ha recibido mas y mejor formacion; formacion sostenida en la creencia de que la investigacion en todas las areas del saber constituye un bien comunitario indiscutible del que el conjunto de la sociedad, y no solo el tejido empresarial, se beneficia ampliamente. En consecuencia, las actuales perturbaciones ligadas a la politica de presupuestos pueden suponer otra oportunidad perdida para un progreso economico y social que no debiera depender de legislaturas, crisis, opiniones o modas.

Esta situacion nos plantea preguntas de distinto calado. Para que invierte la sociedad espannola en una formacion de calidad de la que finalmente no aprovecha sus beneficios? Responde asi a la necesidad de una buena administracion de los presupuestos publicos? Por que no sigue Espanna el ejemplo de otros paises europeos o de Estados Unidos que, frente a la crisis, han decidido aumentar sus presupuestos en investigacion? Que imagen del conocimiento se esta dando en lo relativo a la formacion ciudadana y la constitucion de una sociedad que quiere seguir progresando? Por que, en definitiva, nuestros investigadores deben marcharse?

Los abajo firmantes, investigadores adscritos a diversas areas del conocimiento y el saber y residentes en el extranjero, consideramos esta situacion claramente injusta. Creemos que urge un cambio de direccion tendiente a subsanar los dannos sennalados y dispuesto a apostar por la sociedad de desarrollo, progreso y bienestar a la que todos los ciudadanos aspiramos.