Las personas sin corazón, sobre todo las que viven en campos y parajes aledaños a la zona urbana del municipio de La Vega, República Dominicana, cuando no quieren un perro o gato los abandonan en las cercanías del mercado y en cualquier paraue de la ciudad a su suerte, asustados y sin saber qué rumbo tomar. Al Ayuntamiento le corresponde asignar un área para refugiar y cuidar y esterilizar a estos animalitos. Con voluntarios y empleados del mismo ayuntamiento.