El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha declarado recientemente que las expulsiones "en caliente" de inmigrantes ilegales que España practica de forma recurrente son ilegales, y ha condenado al Estado español por violar la normativa europea, obligando a indemnizar a varias de las víctimas.
El Gobierno español pretendía imponer la ficción de que los inmigrantes que habían sido detenidos cruzando la frontera es como si nunca hubiesen entrado en España y podían ser devueltos al otro lado de la frontera sin posibilidad alguna de recurso.
Esta sentencia deja claro que esta práctica es contraria a los derechos humanos, pero el gobierno aún no ha dado los pasos claros y necesarios para erradicarla. Por eso es importante que firmes esta petición para reclamar al gobierno de España que deje de aplicar las devoluciones en caliente derogando todas las disposiciones legales que la permiten.