El Parque y su Feria: Abandono y Comercio de Animales

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El parque Los Derechos del Trabajador de Villa Dominico, en el partido de Avellaneda, Buenos Aires, Argentina, es testigo del abandono constante de animales dom�sticos y del maltrato diario hacia ellos.

La llamada Feria de los P�jaros, con su sector de mascotas, que se desarrolla en los alrededores del mismo los dias domingos es otra parte importante de esta misma realidad.

La falta de acciones concretas y efectivas por parte de las autoridades contribuyen a que sin controles ni inspecciones, el parque y su feria sean el destino doloroso de muchas vidas.

-         Venta de animales dom�sticos en puestos no habilitados por la Direcci�n correspondiente para tales efectos, ya que los mismos s�lo tienen permiso por ordenanza municipal para su exposici�n, no para su compra-venta.

-         Venta de animales dom�sticos sin habilitaci�n municipal de los puestos y sin certificados de vacunaci�n que acrediten la revisaci�n y buen estado de salud de los animales en cuesti�n por profesionales veterinarios matriculados.

-         Venta irrestricta de animales dom�sticos por los particulares que se instalan y ocupan el espacio p�blico en cuesti�n.

-         Falta de condiciones de higiene en forma particular, en cada puesto, y en general.

-         Exposici�n de los animales a condiciones insalubres y maltrato: animales de distintas camadas son reunidos en un mismo recinto por horas, en jaulas min�sculas, en cajas de cart�n pisando su propio excremento; perros en apariencia sanos comparten la misma jaula con aquellos que presentan evidentes signos de alg�n mal (secreciones oculares abundantes, delgadez extrema, raquitismo, etc.)

-         Abandono de animales dom�sticos (tanto por feriantes como por particulares), en la zona comprendida por la mencionada feria y en sus alrededores, especialmente en el parque Los Derechos del Trabajador donde ya habitan 60 animales abandonados.

Este escenario se desarrolla todos los domingos en la avenida Mitre al 5000, en Villa Dominico. Cualquier persona puede comprobarlo con sus propios ojos y ver a los animales, sus sufrimientos y c�mo son comercializados sin restricciones de ning�n tipo.

Por esto mismo el parque ubicado a pocos metros de la feria se transforma en un DEP�SITO de los animales que nadie quiere; de aquellos que se depositan como bolsas de basura debajo de los �rboles. Aunque llueva, esten enfermos, no tengan un mes de vida....Son abandonados en cajas de cart�n, atados de alambrados, dejados con miasis en sus cabezas y / o lomos, agonizando......

Por la falta de los controles suficientes, el comercio de animales en la Feria de Villa Dominico se transforma en el cruel destino de muchos perros y gatos al padecer largas horas encerrados dentro de jaulas min�sculas bajo los rayos del sol hasta que alguien los compra, si es que lo hace.

El abandono es una constante de todos los dias; es moneda corriente y por ello mismo y gracias a la Feria de los Pajaros en el parque de Villa Dominico hoy hay 60 animales que lo habitan, protegemos y cuidamos.

Para intentar cambiar esta realidad por los animales que ya fueron abandonados en el lugar, por los que son comercializados de esta forma ilegal y no autorizada todos los domingos, y por todos aquellos animales que seguir�n siendo las victimas de estos actos.....Es necesario tu firma para elevar este pedido a las autoridades correspondientes.

Muchas gracias por tu colaboraci�n.

Romina. A. Cabral
APAC (Asociaci�n para la Protecci�n de Animales Callejeros)
Entidad de Bien P�blico, Expediente N� 4004-19183-04, Registro N� 1555, Avellaneda, Buenos Aires, Argentina.
http://www.apacavellaneda.com/

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The park the Rights of the Worker of Dominican Villa, in the party of Avellaneda, Buenos Aires, Argentina, is witness of the constant domestic animal abandonment and the bad treatment they sadly receive.
The call Fair of the Birds, with its sector of pets, that is developed in the neighborhood of the same the days Sundays is another important part of this same reality.
The lack of concrete and effective actions on the part of the authorities contributes to that without controls nor inspection, the park and its fair are the painful destiny of many lives.
 - Domestic animal sale in positions qualified by the corresponding Direction for such effects, since the same only have permission by municipal ordinance for their exhibition, does not stop its transaction.
- Domestic animal sale without municipal qualification of the positions and certificates of vaccination that credit to the revisaci�n and good state of health of the animal at issue by registered veterinary professionals.
- Unrestricted domestic animal sale by the individuals that settle and occupy the public space at issue.
- Lack of conditions of hygiene in particular form, each position, and generally.
- Exhibition of the animal to unhealthy conditions and I mistreat: animal of different litters are reunited in a same enclosure per hours, very small cages, cardboard boxes being above their own excrement; seemingly healthy dogs share the same cage with which they present/display evident signs of some evil (abundant ocular secretions, extreme thinness, raquitismo, etc.)
- Domestic abandonment of animals (as much by feriantes as by individuals), in the zone included by the mentioned fair and in its environs, especially in the park the Rights of the Worker where they already inhabit 60 left animal.
This scene is developed all the Sundays in the Mitre avenue to the 5000, in Dominican Villa. Any person can verify it with her own eyes and see the animal, her sufferings and how they are commercialized without restrictions of no type. By this same park located to few meters of the fair she transforms herself into a DEPOSIT of the animal that nobody wants; of that they deposit themselves like sweepings bags underneath the trees. Although it rains, they esten ill, they do not have a month of life%u2026.They are left in cardboard boxes, tied of fencings, lazy with miasis in its heads and/or backs, agonizing ...... By the lack of the sufficient controls, the animal commerce in the Fair of Dominican Villa transforms into the cruel destiny of many dogs and cats when suffering long hours locked up within very small cages under rays of the sun until it buys somebody them, if it does. The abandonment is a constant of every day; it is current currency and this is precisely why and thanks to the Fair of the Birds in the park of Dominican Villa today there are 60 animal inhabit that it, we protect and we took care of. In order to try to change this reality by the animal that already were left in the place, by which all the Sundays are commercialized of this illegal and nonauthorized form, and by all those animal that will continue being the victims of these acts ..... It is necessary your company/signature to elevate this order to the corresponding authorities. Thank you very much by your collaboration

ANTECEDENTES:

Fuente: http://www.proyectogeo.com/noticias/nt_pages/nt_39044.asp

15/12/2006 - En la Feria de Villa Dom�nico, en el partido de Avellaneda, cientos de animales en venta miran el mundo a trav�s de las rejas. Como si fuera una c�rcel en miniatura, donde los reos portan plumas, colmillos o escamas. All� despliega su circo furtivo, cada domingo, Guillermo Fabi�n Tarello, un comerciante de 41 a�os que desaf�a a inspectores, ecosistemas milenarios y efectivos de la Polic�a Bonaerense II que se re�nen a pocos metros de su puesto.

Una denuncia presentada por la Fundaci�n Vida Silvestre Argentina indica que Tarello estar�a vendiendo ejemplares de especies silvestres, muchas de ellas en peligro de extinci�n, cuya comercializaci�n est� prohibida en la Argentina.

"El motivo de la presente es poner en su conocimiento la oferta ilegal de anfibios y reptiles por parte de varios puestos de la Feria de P�jaros de Villa Dom�nico", se�ala la denuncia presentada ante la Direcci�n de Fauna de la Naci�n y la Direcci�n de Contralor y Uso de los Recursos Naturales y Pesqueros del gobierno bonaerense.

Y detalla: "En particular, el del se�or Tarello, quien ofertaba en los domingos pasados ranas trepadoras de origen brasile�o (Phyllomedusa) y una considerable cantidad de saurios chaque�os (entre ellos, Teius teyou). A pocas cuadras de su puesto tiene su dep�sito, donde suele ofertar otros animales, como lagartos overos y colorados (Tupinambis) y boas ampalaguas y arcoiris, en su enorme mayor�a de origen santiague�o", precisa.

En ese stand de la feria, se pudo comprobar que tambi�n se ofrec�a, por 35 a 60 pesos, gran variedad de tar�ntulas, entre ellas las chaque�as. "La comercializaci�n de esas ara�as, que pertenecen a la familia Migalomorphidae o Migalomorfas, est� prohibida", explica Marcelo Silva Croome, jefe del Area de Fiscalizaci�n de la Direcci�n de Fauna de la Naci�n. "Algunas provincias s�lo dan permisos de captura con fines cient�ficos, nunca para comerciar". Pero la actividad il�cita no se limita a las ferias de zona sur.

Mono se vende

Aunque no hay cifras oficiales, se estima que en la Argentina el comercio ilegal de fauna silvestre mueve unos 50 millones de d�lares anuales, seg�n indica el libro La situaci�n ambiental argentina 2005, publicado en mayo por la Fundaci�n Vida Silvestre Argentina. Un gran negociado que en el pa�s acorrala a varias especies amenazadas como la boa ampalagua, la tortuga terrestre chaque�a, el cardenal amarillo y la vicu�a. En igual situaci�n est�n el tat� carreta, el yaguaret� y el venado de las pampas, entre otros. Interpol ubica esta variante del tr�fico, el de animales, en el tercer puesto a nivel mundial, detr�s del narcotr�fico y la venta ilegal de armas.

"Los animales son buscados vivos o muertos para venderlos como mascotas ex�ticas, trofeo o como subproductos, como sucede con los carpinchos, por su carne y su cuero", resume la veterinaria Claudia Nigro, presidenta de la Red Argentina Contra el Tr�fico de Especies Silvestres. La experta asegura que en el pa�s, lo que m�s se trafica son aves, aunque hay un flujo ilegal constante de reptiles y mam�feros.

El 28 de noviembre, guardafaunas y personal de la Secretar�a de Medio Ambiente de Rosario incautaron en el fondo de un supermercado de esa ciudad dos monos caray�, dos loros, un cardenal y tres jilgueros. En otro operativo hallaron unos 380 p�jaros aut�ctonos que iban a ser vendidos en el mercado negro.

Ese mismo d�a, pero en La Pampa, la Justicia conden� a dos a�os de prisi�n condicional e inhabilitaci�n de cuatro a�os para ejercer cargos p�blicos a Felipe Vald�z, un funcionario provincial que se hab�a apropiado indebidamente de dos llamas nacidas en una granja experimental del Estado. "Me gustar�a tener dos de esos animalitos", dicen que pronunci� Vald�z. Tambi�n fue condenada a un a�o de prisi�n excarcelable y dos a�os para ejercer funciones p�blicas a la veterinaria que le entreg� los animales.

"Raptados de su ambiente natural, donde cumplen una funci�n biol�gica, estos animales se estresan y se enferman", indica Nigro. "A los monos beb�s les matan a las madres y a los machos adultos que los protegen. Las cr�as son las que tienen m�s inter�s comercial", aclara. En las ciudades, estos animales silvestres padecen enfermedades que a veces son dif�ciles de diagnosticar. "Los primates pueden transmitir tuberculosis y salmonelosis, y los loros, psitacosis", alerta la m�dica veterinaria. Aunque algunos miran para otro lado.

A mediados de noviembre, un aviso clasificado publicado en el sitio www.segundamano.com.ar, ofrec�a un mono aullador rojo a 75 pesos: "Se alimenta de vegetales y carnes magras (...) toma yogur (de vainilla). Muy cari�oso. Responde al nombre de Marito", dec�a el anuncio.

Alerta animal

El universo de la demanda es infinito, impredecible. "Mientras haya compradores, va a haber tr�fico", asegura Ver�nica D�az, coordinadora del Grupo Fauna Silvestre Contra el Tr�fico de Aves Argentinas. En Buenos Aires, C�rdoba, Mendoza y Rosario conviven las viejas costumbres con modas fugaces: est�n los de siempre, que buscan tortugas terrestres y loros habladores como mascotas, y los exc�ntricos que quieren pumas, guacamayos, tar�ntulas y boas aut�ctonas, o incluso un c�ndor andino.

"Por eso, las formas de ocultamiento suelen ser un problema grave", indica el comandante principal Mario Ismael Fern�ndez, jefe de la Divisi�n Protecci�n Ambiental de Gendarmer�a Nacional. "No es f�cil llevar un ave o un reptil escondido. Los meten en valijas de doble fondo, bolsas, medias, cajas de video... hasta los drogan. Hace unos a�os, en una intervenci�n, rescatamos un mono que era llevado en una viandera", recuerda.

Otras veces, las especies son v�ctimas de la caza deportiva o de la caza furtiva con la finalidad de usar su carne, su cuero o su cornamenta. Tambi�n se las mata con fines decorativos. "Hace dos a�os, con Vida Silvestre, detectamos a un taxidermista suizo que cazaba ilegalmente en un parque nacional", recuerda Hern�n Ib��ez, inspector de la Direcci�n de Fauna. "Se estaba llevando unas 230 aves para embalsamar, entre ellas un Maca Tobiano, una especie que est� en peligro. Ni en el museo de Ciencias Naturales tienen un ejemplar montado".

Prohibidos

La caza, tenencia y venta de aves aut�ctonas como jilgueros, siete colores y reinasmoras est� prohibida. Lo mismo pasa con los monos caray�, los yacar�s overos y las tortugas terrestres, entre otros animales muy demandados. Su captura y comercializaci�n est� penada por la ley nacional 22.421 sobre conservaci�n de fauna silvestre. Las sanciones van de los seis meses a los dos a�os de prisi�n.

Por eso, en la Argentina est� permitida la importaci�n de algunos tipos de loros, tortugas norteamericanas, iguanas verdes y otros reptiles que son criados legalmente. "Para que una persona compre un cardenal amarillo en una pajarer�a o en un pet shop tal vez murieron nueve p�jaros en el camino", aclara Silva Croome, de la Direcci�n de Fauna.

Claudio Bertonatti, uno de los directores de la Fundaci�n Vida Silvestre, aconseja: "Antes de comprar una mascota, debemos averiguar si es legal y si podemos cuidarla bien". Y advierte: "Muchos creen que detr�s del tr�fico de fauna s�lo hay un traficante, pero hay muchos m�s: funcionarios p�blicos, transportistas y, sobre todo, compradores".

L a mayor�a de las especies amenazadas por el tr�fico y la caza furtiva habita en el Gran Chaco Americano, una regi�n ecol�gica de m�s de un mill�n de kil�metros cuadrados repartidos entre Argentina (61 por ciento), Paraguay (25 por ciento), Bolivia (14 por ciento) y Brasil (0,1 por ciento). Es una de las zonas m�s biodiversas del planeta, y el �rea boscosa m�s grande del continente despu�s del Amazonas.

En nuestro pa�s, la regi�n abarca las provincias de Chaco, Formosa, Santiago del Estero, Salta, Jujuy, parte de Corrientes, Tucum�n, Santa Fe, C�rdoba, Mendoza y La Rioja. De all� bajan, como lluvia, las rutas silenciosas del tr�fico de animales. Seg�n la Direcci�n de Fauna de la Naci�n, se estima que cerca del 80 por ciento de esos ejemplares, extra�dos violentamente de su h�bitat, muere antes de llegar a las "bocas de expendio". A los que se salvan no les va mejor.Perfil - Foto: Luis Rock